Tu hogar puede estar diciéndote algo que no quieres oír.
Muchos pisos en España se han sellado mejor para ahorrar energía. Ese avance trae un efecto colateral: aire viciado, humedad acumulada y moho. Con pequeñas decisiones y poco presupuesto, puedes cortar el problema antes de que afecte a tu salud y a la de los tuyos.
Cuando el exceso de aislamiento pasa factura
El aislamiento reduce pérdidas de calor, pero si se combina con un sellado total, la vivienda deja de respirar. La humedad que generas al ducharte, cocinar o tender ropa queda atrapada. El CO2 sube por las noches. Los compuestos de pinturas y muebles se concentran. El resultado se nota en tus mucosas, en la madera y en la pintura.
Sellado sin ventilación: el cóctel para el moho
Las carpinterías nuevas cierran herméticamente. Sin aireadores o rejillas, el vapor condensa en los puntos fríos: esquinas, dinteles y detrás de los armarios. Esa película de agua alimenta hongos y bacterias. Una pared que toca 16 ºC con 60 % de humedad ambiental ya puede condensar en invierno. No hace falta ver gotas para que el moho avance.
Meta sanitaria del hogar: humedad relativa estable entre el 40 % y el 60 % y CO2 por debajo de 1.000 ppm.
CO2, VOC y radón: los invitados invisibles
El CO2 alto te despierta con dolor de cabeza. Los compuestos orgánicos volátiles de barnices y tableros irritan y marean. En zonas graníticas, como partes de Galicia y Castilla y León, el radón se acumula si sellas el forjado sin entradas de aire. Un piso hermético sin ventilación mecánica necesita vías de renovación controladas.
Señales claras de que tu casa se está “enfermando”
- Vaho persistente en ventanas al amanecer y marcos húmedos.
- Manchas negras o verdosas en juntas de baño y esquinas frías.
- Olor a humedad en armarios y ropa que tarda en secar.
- Pintura abombada, desconchada o con salitre en muros exteriores.
- Picor de ojos, congestión matinal, tos seca o empeoramiento de alergias.
- Madera hinchada o parquet levantado cerca de fachadas.
- Condensación en cisternas y tuberías visibles.
Una familia de cuatro personas puede liberar entre 6 y 10 litros de agua al aire en un día normal.
Soluciones baratas que sí funcionan
Ventilar mejor sin perder calor
Abre en cruz 10 minutos dos veces al día. El aire se renueva rápido y las paredes conservan calor. Acciona la función de microventilación de las ventanas cuando cocines o te duches. Si tienes extractores en baños o cocina, déjalos 15 minutos después de terminar. Ajusta las lamas de persianas para evitar corrientes directas sobre personas y reducir la sensación de frío.
No tapes las rejillas existentes. Mantén un hueco de 1 a 2 cm bajo las puertas para que el aire circule hacia los extractores. Si tu cocina tiene campana de recirculación, limpia o cambia filtros cada 3 meses para que capture grasas y parte de los olores.
Control de humedad con pequeños gestos
- Tapa ollas y usa el extractor desde que el agua hierve.
- Cierra la puerta del baño al ducharte y ventila después, no durante.
- Evita tender dentro; si no hay alternativa, usa deshumidificador cerca del tendal.
- Separa 5 cm los muebles de las paredes exteriores; deja que el aire circule.
- Revisa sifones y juntas; un goteo lento eleva la humedad horas cada día.
Arreglos de bajo coste para una casa más sana
- Coloca aireadores en marcos de ventanas o tapas autorregulables en rejillas.
- Sella filtraciones de agua en cajas de persiana y pasos de instalaciones con masilla acrílica.
- Usa pintura mineral (silicato o cal) en muros fríos; transpira y frena el moho.
- Instala un deshumidificador de 10–12 L/día en estancias más húmedas.
- Instala burletes en puertas exteriores para cortar infiltraciones no deseadas y dirigir la ventilación por las rejillas.
| Medida | Coste estimado | Impacto esperado | Cómo comprobarlo |
|---|---|---|---|
| Aireadores de ventana | 20–40 € por unidad | CO2 y olores más bajos | CO2 nocturno baja 200–400 ppm |
| Deshumidificador 12 L/día | 120–180 € | Menos moho y vaho | Humedad se estabiliza en 45–55 % |
| Pintura mineral en pared fría | 25–40 € por habitación | Moho más difícil | Sin manchas tras 1–2 meses |
| Burlete + masilla en cajas | 10–25 € | Corrientes controladas | Menos polvo y silbidos |
| Medidor CO2 + higrómetro | 35–60 € | Decisiones basadas en datos | CO2 < 1.000 ppm; HR 40–60 % |
Errores habituales que disparan la humedad
Tender sobre radiadores empuja litros de vapor al aire y crea estrías de moho sobre la pared. Apagar los extractores tras cocinar deja humedad atrapada en la encimera y la campana. Pegar muebles contra muros de fachada enfría la superficie y favorece la condensación. Pintar sobre moho con látex plástico sin limpiar y sin sanear solo lo tapa unas semanas.
Cuándo instalar ventilación mecánica y qué alternativas hay
Si notas CO2 alto por la noche en dormitorios (más de 1.500 ppm), manchas que vuelven cada temporada y no puedes ventilar por ruido o contaminación exterior, una ventilación mecánica puede merecer la pena. Un equipo de doble flujo con recuperación de calor reduce pérdidas energéticas, pero su coste se aleja de un presupuesto ajustado.
Como paso intermedio, existen extractores higroregulables para baños que arrancan con humedad alta, aireadores de ventana con filtro para polvo y kits de impulsión que meten aire a baja velocidad en el pasillo. No requieren obras grandes y alivian el problema en viviendas pequeñas.
Salud y seguridad: no te la juegues con la combustión
Si tienes caldera atmosférica o estufa de gas, controla la ventilación permanente. Un piso muy sellado puede devolver gases de combustión al interior. Instala un detector de CO en el dormitorio y en el pasillo. Revisa conductos y tomas de aire anualmente. La seguridad manda por encima del ahorro.
Cómo medir sin gastar de más
Un higrómetro digital cuesta menos que una cena y te guía al ventilador o a la ventana. Si marca por encima del 60 % de forma estable, actúa. Un medidor de CO2 con sensor NDIR te dirá si la ventilación es suficiente en dormitorios y salón. Anota lecturas matinales durante una semana y ajusta rutinas.
Pequeña guía de actuación por perfiles de vivienda
Pisos antiguos con carpinterías nuevas
Abre aireadores o instala unos sencillos. Sanea mohos con peróxido de hidrógeno y repinta con pintura mineral. Ventila en cruz a primera hora y antes de dormir. Revisa cajas de persiana y sella fisuras.
Obra nueva muy estanca sin ventilación mecánica
Controla CO2 nocturno. Si supera 1.200–1.500 ppm de forma sostenida, añade aireadores y extractores con temporizador. Mantén puerta bajo 1–2 cm para flujo interior. Evita tender dentro.
Plantas bajas y semisótanos
Prioriza el deshumidificador y separa muebles de muros. Valora una lámina antihumedad en contacto con suelo para armarios y estanterías. Vigila el radón con un kit económico si vives en zona potencial.
Coste real de no actuar
Un brote de moho en dormitorio obliga a repintar y tirar textiles. La factura supera con facilidad los 200–300 €. Un deshumidificador y un par de aireadores salen por menos y evitan el ciclo de daños. El tiempo invertido en ventilar bien también reduce ácaros y mejora el descanso.
Consejos extra para ampliar el margen de confort
Una alfombra sobre suelos muy fríos aumenta la temperatura operativa y reduce la condensación cerca del rodapié. Las cortinas térmicas cortan el frío del vidrio, pero deja espacio para que circule aire en el alféizar. En invierno, apunta a 19–21 ºC estables; variaciones grandes favorecen el agua en superficies frías.
Si dudas entre invertir en aislamiento o en ventilación, piensa en equilibrio: una pared más cálida condensa menos y una renovación de aire controlada mantiene la humedad a raya. La clave no es sellar sin medida, sino combinar sellado, aislamiento y ventilación con cabeza y con datos de tu propia vivienda.










Aquí en Madrid renové ventanas y empezaron los problemas: vaho mañanero y dolor de cabeza. Seguí tus trucos de microventilación y dejé el extractor 15 min, y se nota. Compré un medidor de CO2 e higrometro baratito (NDIR + Bluetooth) y por fin tengo datos: noches por debajo de 1.000 ppm y HR en 45–55 %. Me faltaba separar muebles 5 cm, error tonto. Gracias por explicar sin alarmismo; la pintura mineral fue mano de santo.
¿De verdad un deshumidificador de 120–180 € basta para un salón grande? En mi piso (70 m2) baja algo, pero en cuanto cocinamos sube a 70% otra vez. ¿No sería mejor invertir directo en ventilación mecánica? Siento que algunos consejos suenan a parches. Y lo de abrir en cruz en invierno… brrr, perdemos calor a saco.